- El legislador Federal mantiene un diálogo abierto con representantes de distintas organizaciones religiosas.
- Imposible omitir el lado espiritual de las personas, cuando se pretenden fomentar los valores que fortalecen a las familias, dignifican a las personas y contribuyen a recomponer el tejido social.
El Senador por Aguascalientes, Martín Orozco Sandoval, reconoció el importante papel que cumplen las distintas organizaciones religiosas dentro de la sociedad, y en el respeto al Estado laico, señaló que es necesario considerar su opinión y propuesta en la definición de un México mejor.
Entrevistado luego de sostener sendas reuniones, tanto con representantes de la Iglesia Católica como del Centro Cristiano Alfa y Omega, Orozco Sandoval mencionó que no es posible desestimar el lado espiritual de las personas, cuando se pretenden fomentar aquellos valores que contribuyen a diseñar y fortalecer los hogares, a concretar un proyecto de vida individual y recomponer el tejido social.
Mencionó que para avanzar en la consolidación de la democracia, es necesario siempre estar abierto a considerar en las políticas públicas cualquier opinión y propuesta, independiente a ideologías, militancias y credos.
Habló de la trascendencia de sus encuentros con los representantes de las distintas iglesias, en los que se ha establecido un diálogo abierto donde ha sido posible explicar el trabajo que viene desempeñado desde el Senado de la República y a su vez, recabar aquellas inquietudes que se tienen para ser defendidas y analizadas desde la máxima tribuna legislativa.
“Hay varios asuntos que hoy preocupa a todos, entre los que están la defensa de las familias y el que dispongan de los insumos suficientes para que todos sus integrantes logren cumplir sus aspiraciones y con ello ir superando aquellos rezagos que más nos lastiman como sociedad”, indicó.
Refirió que un tema que se ha abordado con especial interés es el de la corrupción, que tiene su punto crítico en cualquier nivel de la administración pública.
Martín Orozco puntualizó no estar de acuerdo con que sea considerada la corrupción como parte de la cultura mexicana. “Es un vicio que se ha ido arraigando y creciendo con el tiempo, pero que está en la formación que recibe cada uno, en la solidez de principios como la honradez y el respeto a los demás, como se podrá ir erradicando”.
Mencionó por tanto, que es una tarea que compete a todos. Que es el trabajo honesto y transparente el que permite ser mejores personas y que si se aplica desde el gobierno, redituará en resultados que a todos benefician.
“La corrupción no se va a resolver en el discurso. La sociedad está desencantada de la clase política precisamente por la corrupción. Está simplemente en proceder en la legalidad y la ética para que la gente vuelva a creer en sus gobiernos”, agregó.
Dijo así, que quienes ocupan algún cargo en el sector público, deben proceder siempre con el ejemplo, en procurar el bien común y dejar un legado de rectitud en la manera de hacer política.
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